9 de Octubre, 2015
Desde la Federación Universitaria Argentina (FUA) queremos manifestar nuestro repudio ante los hechos ocurridos los últimos días en Jáchal, San Juan, donde luego de haberse derramado 1 millón de litros de solución cianurada en el Río Jáchal, el pasado 14 de Septiembre, a manos de la empresa multinacional Barrick Gold, el gobernador Gioja no ha reaccionado en favor del pueblo sanjuanino.
Las mediciones realizadas por los laboratorios de la Universidad Nacional de Cuyo (a pedido de los asambleístas) arrojaron que «en el río La Palca hay 1,4 mg/l de manganeso, lo que representa un 1.400% más de lo permitido y lejos del 0,25 mg/l de promedio histórico. Lo mismo ocurre con el aluminio: mientras la media suele ser de 4 mg/l y el máximo autorizado es de 5mg/l, los especialistas encontraron 70 mg/l. A su vez, en el pueblo de Mogna hallaron niveles de boro, arsénico, cloruros y sulfatos muy por encima de los topes establecidos en la Ley de Residuos Peligrosos. Y se detectó la presencia de la bacteria Escherichia coli, por lo que se puso en duda la forma en que Veladero trata sus efluentes cloacales».
Luego de conocer los resultados de las mediciones realizadas por la UNCuyo, Gioja atacó a esta casa de estudios y a los vecinos agrupados de Jáchal por «sembrar terrorismo», amenzando con judicializar a dos de los asambleístas, Zeballos y Jofré.
Es por todo ello que solicitamos al gobernador de la Provincia de San Juan, que en lugar de defender los intereses de Barrick Gold, defienda los de su pueblo. Hacer caso omiso de la realidad que viven los vecinos de Jáchal es, no sólo jugar con la salud de las personas, sino con los recursos del Estado que le toca administrar.
Denunciamos el accionar con el que han procedido hacia los asambleistas, y a estos, les ratificamos nuestro apoyo, porque defender la vida, los derechos humanos y el cuidado de nuestros recursos naturales, no es un delito.
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