Finalmente se empezaron a conocer los resultados de solicitud de la beca PROGRESAR. Lamentablemente, miles de estudiantes de todo el país fueron rechazadxs porque su grupo familiar tiene ingresos superiores a $73.224, es decir, tres salarios mínimos, vitales y móviles.
La beca funciona como sostén para aquellos que quieren acceder a estudios terciarios o universitarios pero su situación económica no se los permite. Por eso, ante la crisis económica y social en la que estamos hace años, ya no tiene sentido limitar su acceso a este criterio cada vez mas alejado de la realidad. Sobre todo teniendo en cuenta que el monto que representan los tres salarios mínimos exigidos, están apenas por encima de los $60.874 que necesita un grupo familiar para no estar bajo la linea de pobreza.
En este sentido, el PROGRESAR se transformo con el correr de los años en un pilar fundamental para amortiguar la crisis económica constante y permitió continuar con sus estudios a miles de jóvenes, aun siendo insuficiente para afrontar la totalidad de los gastos que implica una carrera universitaria.
Por esto, entendemos que es momento de replantear el sistema de becas y los criterios para otorgarlas. Una política pública que busca fomentar la inclusión y el desarrollo a través del estudio, no puede mirar para el costado en este contexto. El acceso a la educación no puede ser un privilegio para aquellos que puedan pagarla, el Estado debe generar herramientas para garantizar la Educación Pública y Gratuita en todo el país.